Hay momentos que no se olvidan más. Seguramente lo que vivió ayer Marcelo Vidal quedará en su cabeza para siempre. Iban 42 minutos del segundo tiempo cuando el volante pateó desde atrás de mitad de cancha y anotó el gol que le dio la victoria a Independiente ante Patronato.
Con este triunfo, el "Rojo" escaló al tercer lugar de la tabla de posiciones. Lugar en el que se quedará, por lo menos, hasta que juegue Crucero del Norte y, además, mantiene viva su esperanza de volver a la Primera División del fútbol argentino. "Me gusta pegarle al arco. Por suerte, se me está dando y la estoy metiendo", dijo un satisfecho Vidal tras el encuentro.